PANTONEMAGENTA

Sorpresa! Marcelo resultó ser finalmente Carmela

A menos de una semana de saber que nuestro bebé es una niña, aún parece surreal! Muchas personas nos decían, "ojalá se deje ver", "a veces juntan las piernitas y no se logra ver si es niño o niña"... yo le dije a nuestro bebé que para ese entonces llamábamos Marcelo, que por favor abriera las piernitas y nos dejara ver si era niño o niña, y dicho y hecho, el doctor encendió el monitor y allí estaba de nalgas, claramente mostrando orgullosamente su bella vagina! "es evidentemente una niña" nos dijo el doctor... y nosotros no podíamos creer tanta obediencia y que nuevamente el chip se cambiara... de Marcelo pasamos a Carmela en un dos por tres.

Su nombre será Carmela, sí, como yo y como mi mamá, aunque les cuento que mi mamá se llama Carmela por mí y no al revés, aunque no lo crean. Mi mamá fue nombrada María de Carmen al nacer, y sí, le llamaban Carmela como a muchas Carmen les llaman Carmela en España... cuando yo nací y decidieron mis papás nombrarme Carmela, mi mamá decidió cambiarse el nombre de María de Carmen a Carmela. Es cierto eso de que cada persona debe tener su propio nombre, las constelaciones familiares lo recomiendan por ejemplo, pero Carmela me encanta y es algo sumamente especial para mí. Para muchas personas su apellido es algo que llevan con orgullo y lo valoran enormemente, a mí mi apellido honestamente no me importa mucho, lo que valoro, me identifica y llevo con mucho honor es mi nombre de pila, podría no tener apellido con el nombre que tengo y creo que para nuestra hija sería un buen regalo, un regalo que me ha hecho bien y que he alimentado con amor, fuerza y gracia, es un buen nombre y espero con él heredar a nuestra hija lo mejor de mí.

Así como se me había olvidado, al principio, lo mucho que en un momento habíamos deseado un bebé, así también se me había olvidado lo mucho que desee, desde siempre, tener una hija. Ahora que Carmela es una realidad, recordé tantas cosas que había pensado y guardado para ella. Desde siempre, desde que recuerdo, he guardado con muchísimo cuidado pequeños tesoros que en su momento mi mamá y mi papá compraron para mí.

Entre todos esos tesoros, guardo el vestido con el que salgo en la que fuera mi primera sesión de fotos, está nítido, solamente le falta la moñita pero es lo de menos.

Cuando nací, mi papá diseñó mis primeros aretes y los he guardado todo este tiempo para el momento en que yo tuviera una hija, los he conservado conmigo siempre, y ahora ya tienen dueña :)

Entre las cosas que tenía guardadas, encontré estas bellezas cursis... es posible que las haya comprado hace unos 20 años, yo era pequeña y no sé que pasaba en mi cabeza en ese momento, siempre tuve la ilusión de tener una casa y un bebé, por la situación con mi papá, casarme no era mi mayor sueño, pero tener un bebé era lo más grande que podría tener en mi vida. Ese era uno de mis mayores deseos. En cada viaje siempre compré algo para quien fuera mi hija, una traje de fresa en Tokio, un mameluco del tour de France que compramos con Jorge en París, unos zapatitos de Indonesia que conseguí en una feria...

Ese día que nos confirmaron que nuestra bebé era una niña, lo primero que hice fue ir a comprar un regalo para recordar ese momento, en la prisa y la emoción no se me ocurrió otra cosa que comprarle algo de ropa, quería rosado, lentejuelas, brillantina, corazones, unicornios... y me topé con esta blusita perfecta! Cada vez que la use, aunque sean pocas veces porque los bebés crecen demasiado rápido, recordaré ese día especial cuando supimos que tendríamos una maravillosa niña.

Pero de cualquier tesoro que pudiera haber guardado, deseado o soñado, el mejor de todos es el saber que nuestra hija no podría tener un mejor papá, cada vez que veo a Jorge pienso en lo dichosas que somos, sé que no podríamos tener a nuestro lado un mejor hombre, que nos ama, respeta y valora, por sobre todo es nuestro fan número uno. Uno muchas veces da las cosas por sentado, pero en un mundo donde son las niñas quienes tienen menos oportunidades, es una bendición saber que esta niña, desde ya, tiene todo el amor y apoyo de sus padres y que ser mujer es la primera de sus virtudes.

Y ahora a casi cinco meses de embarazo, gracias a Dios todo sigue muy bien, cero molestias aparte del sueño... ya la he sentido por primera vez, y si escuchar su corazón es algo mágico, sentirla es fuera de este mundo y sobre todo único e indescriptible, es una especie de pececito en el estómago haciendo burbujitas, la primera vez pensé que eran mis tripas pero al sentirla por segunda y tercera vez supe que no era yo, sino ella.

Cada cosa es única, cada cosa que pasa por primera vez es algo increíble, y de ahora en adelante nuestra vida estará llena de primeras veces, las primeras veces habían desaparecido bastante de nuestras vidas y tenerlas ahora es refrescante y una aventura total!

La historia de Cupido y de cómo besé varios sapos hasta encontrar al príncipe azul

Es febrero y como diría la canción "love is in the air"... me siento muy dichosa de compartir cada día, y no sólo el 14 de febrero con la persona que más amo y que más me ama, pero no siempre fue así, no siempre me sentí dichosa y amada. Durante toda mi vida, antes de conocer a Jorge, besé muchos sapos, unos "medio medio", otros no tan malos y otros de lo peor... lo bueno es que viví para contarlo y aprendí las lecciones que debía aprender.

El primer gran premio al peor, lo comparten a quienes llamaré Alejandro y Jonathan, el primero un hombre violento, que por miedo no dejé desde el día uno, que por "bruta o inocente" me fui a vivir con él, con la ilusión de formar un hogar, algo que siempre había deseado inmensamente a concecuencia de los problemas que había vivido en mi casa. Todo eran problemas creados por su mente, todo era gritos y reclamos. Esa parte de mi vida la llamo "Sleeping with the enemy", sí, como la película de los 90's de Julia Roberts; una vez se me cayó una lata de atún en el piso de madera y una duela se lastimó, el golpe fue de milímetros y cuando él se dio cuenta, me gritó como loco. Me levantaba a la fuerza de madrugada a correr porque me decía que tenía que adelgazar; en una ocasión me ahorcó y la última vez que me maltrató fisicamente fue el día que me somató contra la persiana de un negocio por el que íbamos caminando mientras me gritaba, me agarró de los hombros y me empujó contra la persiana metálica y me dijo que le pusiera atención que me estaba hablando. Esa fue la última vez que me gritó y me lastimó, ese día volví a su casa, recogí mis cosas y lo dejé.

El segundo empatado en el primer lugar, fue alguien quien pensé que era una buena persona durante casi tres años hasta que me enteré que siempre me había sido infiel. Era un mentiroso compulsivo y aún así estuvimos juntos, viviendo juntos casi cuatro años y en un "on and off" casi un año más... y me pregunto por qué malgasté mi vida casi cinco años, por qué me dejé maltratar psicológicamente por este mentiroso tantos años, y la respuesta para ambos casos es la misma, una inmadurez emocional tremenda de mi parte, así de simple y que ahora, después de sanar esas heridas de mi corazón me doy cuenta. Tenía "el amor" (que obviamente no es amor) que creía merecer gracias a mi profunda ignorancia emocional y sentimental. 

Pero al igual que todo lo que he vivido, nada cae en saco roto y por malas que hayan sido esas nefastas experiencias, han valido la pena porque las logré superar y aprendí las lecciones que debía aprender. Aprendí que cada quien tiene la relación que se permite tener, que la responsabilidad del abuso en una relación, no es sólo del abusador sino también de quien se deja, que cada uno somos seres valiosos y que absolutamente nadie tiene derecho de maltratarnos física, emocional o psicológicamente. Que el amor es bello y que no lastima jamás, que si lastima o hiere es otra cosa totalmente diferente al amor; que el amor no requiere drama ni tanto esfuerzo, si requiere demasiado esfuerzo no es sano. 

Y pueden pensar ¿por qué no lo olvido y continúo con mi vida y no menciono más el tema ahora que conozco el verdadero amor y soy tan feliz? esas experiencias son parte de mi historia, de mi vida, que de una manera u otra han contribuido a convertirme en la persona que soy, si lo olvido, no funciona, si lo enfrento y aprendo de ello ha valido la pena. Y si lo comparto y a alguien le sirve mi experiencia, entonces vale doblemente la pena.

Gracias a Dios tuve la oportunidad de reivindicarme y me llené de valor y amor a mi misma. La vida me dio una segunda oportunidad y cuando Jorge llegó a mi vida, supe valorarme y valorarlo, aprendí a conocer el verdadero amor, nunca antes había amado y me había sentido tan amada, nunca antes había experimentado ese camino equilibrado de dos vías, nadie me había visto de la manera que él lo hace y a nadie había visto con tanto amor, admiración y respeto, valores que alimentan el amor que siento por él. El verdadero amor es tan rico, no tiene nada que ver con lo que yo pensaba o había experimentado como "amor". El amor está lleno de paz, luz, felicidad, comprensión, romance, pasión, dulzura, admiración y aventura. 

¡Feliz San Valentín! absténganse de besar sapos por favor! ;)

The Good Hotel: bueno para el alma y el corazón

El fin de semana pasado una de mis mejores amigas se casó en la hermosísima ciudad de La Antigua, y decidimos con el pretexto de empezar a celebrar el mes oficial de cupido, pasar la noche y aprovechar el fin de semana.

Nos enteramos de un nuevo hotel, el Good Hotel, vimos las fotos y el diseño nos encantó, luego supimos que era la sede del mes de EN Restaurante de nuestros amigos de Chef Mon Coeur, supimos más acerca de él y nos encantó aún más. Good Hotel Group, con hoteles en Londres, Amsterdam y desde octubre en La Antigua es más que un grupo hotelero con conciencia social, es un proyecto que apoya lo local al máximo, aprovecha el reuso de la materia prima, es autosostenible y cuya alma y corazón es su gente.

Impacta infinitamente a la comunidad como pocos negocios y proyectos impactan de manera positiva. Proveen entrenamiento a personas sin experiencia, educación a los niños de escasos recursos, todos los ingredientes, materiales y mano de obra es local y todas las ganancias se reinvierten en la misma comunidad.

Desde el momento en el que llamé para hacer la reserva se notaba la calidad de la atención, Cristina fue muy amable y desde esa primera impresión todo fue bueno. Llegamos y Nati dulcemente nos atendió en la puerta y nos dio la bienvenida. Fuimos recibidos con una deliciosa rosa de jamaica y fuimos acompañados a nuestra habitación que estaba románticamente decorada con pétalos de rosas, fue magnífico!

El diseño mínimal del hotel en contraste con lo churrigueresco de la ciudad es muy refrescante y agradable, el cuidado y amor en los detalles, reflejado en el diseño del mobiliario es algo hermoso.

Teníamos muchas ganas de pasar el fin de semana en La Antigua, no íbamos desde hacía mucho. Fuimos a desayunar a uno de nuestros restaurantes favoritos, Epicure. Es la mezcla perfecta entre lo francés y lo guatemalteco, el omelette de camarones con queso es una delicia!

Caminar por sus calles, con el clima perfecto de la ciudad es exquisito, aprovechamos a hacer unas compras, conseguimos un teatrino de títeres hermoso para Marcelo, ésa fue la compra del día! 

Visitamos Pachamama y compramos de todo! amamos los tés y ahora que debo cuidar el consumo de cafeína y teína, sólo allí tienen la mejor opción para té durante el embarazo. Don Jorge de Pachamama, quien es experto en tés e infusiones preparó una mezcla según mi gusto, hecha a mi medida, una experiencia súper especial. Nos preparó también una limonada con lavanda y preparamos una granola al gusto hecha con alpiste, chan, amaranto, nueces, almendras, coco, pimienta rosa y cacao puro... espectacular!!!

Y para cerrar con broche de oro, conocimos Ganache, una pastelería deliciosa y acogedora. Probamos el pastel de zanahoria con naranja y el cheesecake de mango, ambos buenísimos. 

Fue un fin de semana maravilloso, definitivamente La Antigua es siempre un lugar mágico y el Good Hotel el lugar a donde volveremos pronto <3

¿qué es la felicidad?

No se si sea por el embarazo, pero definitivamente estoy más sensible y tiendo a pensar y filosofar conmigo misma acerca de la vida y sus misterios. Y digo más sensible, porque desde hace un par de años me he vuelto una persona más sensible y analítica, tenemos una broma interna con Jorge, le digo que "me arruinó", porque antes era más dura y menos sensible y ahora tengo un corazón de pollo que se enternece con casi cualquier cosa y cuando me emociono, hasta lloro, soy terrible!.

Un tema recurrente en mi pensamiento es la felicidad, posiblemente, para muchos de nosotros ser feliz es nuestra meta en la vida, pero, ¿qué es la felicidad?.  Dice la RAE que felicidad es el "estado de de grata satisfacción espiritual y física" y "ausencia de inconvenientes y tropiezos".

Yo me quedo con la primera parte, porque en este mundo inconvenientes y tropiezos van a existir sieeeeeeeeempre. Para mí, a través del tiempo, me he dado cuenta y he podido descubrir que la felicidad es número uno, el tener salud y equilibrio, equilibrio en todo sentido: emocional, mental, espiritual, económico, material.... Y por supuesto que van a existir mejores y no tan mejores épocas, pero que entre ellas se pueda tener equilibrio es lo que para mí significa tener paz y tener paz, es ser feliz.

Personalmente, aceptar nuestras virtudes y defectos, saber objetivamente que somos capaces de "casi" todo lo que nos proponemos y digo "casi" porque aunque debemos creer en nosotros mismos y ser nuestro fan número uno, existen propósitos que estadísticamente son prácticamente imposibles y no deberíamos perder la vida en tratar de alcanzarlos, por ejemplo, si alguien deseara ser la novia de Brad Pitt... no debería ser imposible, pero técnicamente lo es, y además, ¿cumplir un sueño como ese sería realmente la felicidad?, no lo creo. La felicidad es bastante más simple que eso, como decía antes, la felicidad, para mí es equilibrio. Es no tener precisamente todo el dinero del mundo, sino tener suficiente para tener un techo digno, tres comidas al día, que de ser deliciosas no sólo es felicidad sino perfección; agua potable, una cama cómoda para descansar, dormir y soñar; de ser posible un dinero extra para poder viajar.  

Emocionalmente, amor a nosotros mismos, querernos lo suficiente y de tener una pareja, si es lo que deseamos, que sea libre de dramas, que sea una relación de dos vías, amar y que te amen de vuelta con la misma fuerza. Tener una familia, que puede ser de sangre o escogida por nosotros, como los amigos que se vuelven familia... al final es tener amor suficiente, amor propio, amor de los que amamos, amigos que nos quieren realmente, que comparten nuestros valores, nuestra alegría, nuestra tristeza, que estén pendientes de lo que nos afecta y nos importa.

Mi vida no ha sido, no es, ni será perfecta, lo que sí es que ha sido (a pesar de todo) y es maravillosa y privilegiada, he podido hacer más de lo que he soñado, tengo un bucket list de sueños verdaderamente importantes completado, ahora con el bebé que esperamos, ya lo único que me hace falta es escribir un libro y listo. La felicidad aunque no es perfecta, es plena. Mejor que tener fortuna, es ser afortunado. 

Para mí, la felicidad son pequeñas cosas, es llegar a nuestra casa, que es mi lugar favorito; es que Jorge me abrace cada noche antes de dormir y al despertarnos, es cada beso que me da, es ver las fotos y el arte en las paredes de nuestra casa que guardan recuerdos de momentos maravillosos, es compartir una comida con mis seres más amados, es el bienestar de mi familia, es ver a mis amigos y abrazarlos, es el cariño de mis seres más queridos, es viajar, es cantar, es grabar, es celebrar los momentos importantes, es ver películas un domingo en la tarde con Jorge, es abrazar a Máximo y Amelie, es comer pastel, es carcajearse deliciosamente, es disfrutar lo que hago..., es escuchar el corazón de nuestro bebé, es el amor.

Y nadie mejor que mi actor latinoamericano favorito Ricardo Darín para decirlo...

... y para tí, ¿qué es la felicidad?.

 

Propósitos de año nuevo: Ninguno (este año serán puras sorpresas)

Hace cuatro años mi propósito de año nuevo fue mandar a la fregada a "un desgraciado Señorita Laura" que así como suena de broma ahora, en su momento, como muchos saben, me hizo muchísimo daño. Ese ha sido, posiblemente, el mejor propósito de año nuevo de mi vida. Otro gran propósito de año nuevo, uno de los mejores, fue el del 2,014 de estudiar Xilografía, ya han pasado casi tres años y creo que ha sido uno de los propósitos que he cumplido por más tiempo y que más frutos me ha dado...

Generalmente mis propósitos han sido de lo más comunes, ya saben, una vida más saludable, hacer ejercicio, ahorrar, viajar... este año debo ser sincera que no pintaban ser más originales, pero si estaba decidida a tomar de nuevo la bici como medio de transporte principal, bajar algunas libras que me sobran, tatuarme el brazo, ahorrar para hacer un gran viaje de quinto aniversario con Jorge el año entrante y aprender francés. Peeeeeero, después de las buenas nuevas, la bici tendrá que esperar, las libras en lugar de bajarlas las voy a subir, los tatuajes también tendrán que esperar también, los ahorros para el viaje estarán en pausa temporal y del francés como es típico del embarazo... se me quitó el antojo.

Y pensando en este nuevo 2,017 no se me ocurría ninguno pero creo que mi propósito es obvio y es la vida quien me lo pone fácil (el darme cuenta del propósito por supuesto, porque el propósito en sí seguro no será tan fácil): APRENDER.

Este año será de aprender muchísimas cosas nuevas, y como diría un amigo, "el plan es que no hay plan" porque nadie nace sabiendo como ser mamá o papá, y es algo que solito lo aprende uno. Cada cosa que pasa es nueva y no hay manuales ni clases que pueda a uno enseñarle a ciencia cierta lo que es la maternidad y la paternidad. Por supuesto que hay herramientas que nos ayudan pero cada caso es único y lo que tengamos que aprender lo iremos aprendiendo en el camino, lo único que le pido a Dios es que hagamos un buen trabajo.

Un libro hermoso que me tiene enamorada

Un libro hermoso que me tiene enamorada

Mientras tanto he aprendido ya algunas cosas, como que tengo que reducir o eliminar la cafeína de mi dieta y eso incluye el café y el té negro que amo, que no puedo ir a La Antigua por las calles empedradas, que me tengo que embalsamar del cuello a las rodillas todos los días para que la piel no me pique y no se me reviente (taaanto), que no puedo comer ensalada Caesar hahahaha!, que me tengo que aguantar la gana de comer ceviche, que el jengibre es bueno para la náusea (que gracias a Dios sólo me ha dado tres veces en un mismo fin de semana)... y aunque parezcan cosas "tontas" no las sabía y las he aprendido. Y pues bueno... ese es mi plan para el 2,017, aprender.

Después de probar varias cremas, la de Savon es la mejor!

Después de probar varias cremas, la de Savon es la mejor!

Una excelente opción de té sin cafeína ni teína, delicioso!

Una excelente opción de té sin cafeína ni teína, delicioso!

Si algo saben y lo quieren compartir conmigo, se los agradezco. Por el momento si saben dónde es el mejor lugar para hacer yoga prenatal, dónde imparten clases prenatales Lamaze y donde consigo cerveza sin alcohol, se los agradeceré muchísimo!

Feliz 2,017!!!!